viernes, 24 de diciembre de 2010

SaraPepaGon se ríen mogollón


En efecto. Son varios los ejemplos que pueden ponerse de ataques de risas compartidos entre estas tres personas, pero destaca sobremanera el ocurrido en Madrid hace la friolera de casi diez años subiendo por una calle del barrio de Malasaña (¿o era Lavapiés? ¿o era Chueca?). No se recuerda el motivo principal de las risas, pero se sucedían pequeñeces que aumentaban el estado de hilaridad de estos tres seres, que, pese a lo que pueda parecer, no habían ingerido ninguna sustancia psicotrópica o alucinógena. Tan exageradamente escandalosas eran las risas que se contagiaban entre ellas sin orden ni concierto, hasta tal punto que los tres personajes cayeron casi simultáneamente al suelo de rodillas mientras se retorcían en espasmódicos movimientos imposibles de controlar. Tardaron tiempo en recuperarse y poder levantarse para proseguir la marcha y así alcanzar al resto de compañeros de facultad que avanzaban más adelante, y que no alcanzaban a entender tan asombrosa expresión de felicidad y despiporre.

Ayer estuve con Sara y con Pepa, y volvimos a tener otro pequeño ataque recordando estas y otras anécdotas de nuestros años de universidad. A finales de Septiembre de 1996 entrábamos todos en la Universidad para estudiar Historia del Arte. Se cumplen diez años ahora, y muchos de nosotros aún estamos en contacto. Es bonito y divertido reencontrarse con personas a las que tienes cariño y con las que viviste episodios tan auténticos y surrealistas como el del ataque de risa en Madrid. Anécdotas hay miles. Sólo tenemos que tirar del hilo. Por tanto, este paint va dedicado a aquellos años de barriladas y botellonas, de bibliotecas y fotocopias, de porritos y de risas. Y en especial a Sara y Pepa, que, como Gon, se ríen mogollón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...